Has CLICK AQUI para ver la Hora en el Mundo.
Contrata de trabajadores.
En la vida, el tiempo de la vendimia, el dueño tiene necesidad de muchos jornaleros, a los que sale a buscar: a las seis, y a las nueve de la mañana, a mediodía, y a las tres y a las cinco de la tarde.
El dueño es Dios; la vida, su iglesia; los trabajadores los hombres; las horas, las diversas edades de la vida; la noche es la muerte; el denario, la eternidad.
La enseñanza es ésta: Dios recompensa con la gloria a todos; pero reparte su gracia y sus dones como le place dentro de la justicia, porque son enteramente suyos; y acontece a veces que, las llamados a última hora corresponden mejor y trabajan con más perfecta voluntad, reciben gracias extraordinarias, y son los primeros en la paga.
El jornal prometido es igual para todos, y es que el reino de los cielos no puede dividirse, y su participación es siempre un don libérrimo de la infinita misericordia de Dios. La hora del trabajo es la que es muy incierta. Nadie nos asegura que viviremos a la hora de nona o más tarde, “ En la hora que menos pensemos…”.No difieras convertirte a lSeñór.
© 2024 Creada por Rosario ProVida. Con tecnología de
¡Tienes que ser miembro de Rosario ProVida para agregar comentarios!
Únete a Rosario ProVida