MÉXICO D.F., 28 Sep. 10 / 01:39 pm (ACI)
En el día en que grupos feministas "celebran" el día internacional por la despenalización del aborto en América Latina, diversas organizaciones de mujeres en México exigieron la promoción y la defensa de la vida a través de leyes que fomenten la educación, la salud y el empleo para combatir esta práctica anti-vida que destruye la vida de los no nacidos y sus madres.
Las organizaciones criticaron la decisión del Distrito Federal de permitir el aborto hasta la semana 12 de gestación, "cuando la mayoría de la sociedad lo rechaza" y cuestionaron que "se mantengan en la clandestinidad las cifras de procesos realizados en instituciones privadas de la capital y se guarde silencio sobre el síndrome post-aborto".
La presidenta del Instituto para la Rehabilitación de la Mujer y la Familia (IRMA), Mari Carmen Alva dijo que en la especialización del tratamiento al síndrome post-aborto, "se han encontrado con mujeres que incluso han repetido esta experiencia hasta en tres ocasiones, con secuelas psicológicas o bien infecciones, hemorragias e incluso, casos dolorosos de jovencitas que perdieron la matriz y con ello la posibilidad de ser madres de por vida".
Como ejemplo de esto puso el caso de una joven de 23 años quien "estuvo al borde de la muerte por una perforación del intestino debido a un aborto y era el único hijo que tendría en su vida. Se juegan el todo porque no se les orienta, no se les da alternativas más que el ‘deshacerse’ del bebé que lleva en el vientre a costa de su propia salud y la vida misma", explicó
Alva comentó luego que diversos psicólogos, psiquiatras y tanatólogos confirman los estragos del síndrome post-aborto en las mujeres: "porque les siguen diciendo que no pasa nada, que después de la cancelación del embarazo va a seguir su vida como antes, que son un puñado de células, como si no hubiera sucedido nada, pero la realidad las coloca en cuadros permanentes de depresión, trastornos y hasta tendencias suicidas".
La experta dijo que cuando una mujer empieza a descubrir que su vida no es la misma, que tiene pesadillas, insomnio, depresión, angustia, es cuando la mujer requiere de un soporte de especialistas pero no lo tienen, la autoridad capitalina se empeña en asegurar que no existe esta afectación y por lo tanto, quienes promueven el aborto "condenan a la mujer a una vida de silencio".
Tras cuestionar el anuncio, "con bombos y platillos" de que en el Distrito Federal ya se han realizado unos 50 mil abortos, Mari Carmen Alva dijo que "la mujer necesita alternativas distintas al aborto, por ejemplo que se ofrezca como opción servicios de salud gratuitos para adolescentes embarazadas, guarderías y servicios cerca de sus zonas de trabajo, reducción de horarios laborales para las que son mamás, que no la orillen a tomar una decisión equivocada".
Por ello, diversas organizaciones como la Red Pro Yucatán, el Instituto de Formación en Valores de Durango, Código Mujer de Morelos, SéMujer, Centro de Estudios y Reflexión de Veracruz, el Centro de Estudios y Formación Integral de la Mujer (CEFIM-Cancún), Coalición por la Vida de Oaxaca, Mujeres de Los Altos de Chiapas, Abrazamos la Vida de Quintana Roo, entre otras, resaltaron la decisión de 17 estados de la República de blindar la vida desde la concepción.
Estas reformas, dijeron, no atentan contra las mujeres sino que las defienden, así como a sus hijos no nacidos. En algunos estados, explican, se sustituyó la pena de cárcel por atención médica integral y se trabaja por impulsar políticas públicas que favorezcan a la mujer embarazada, sobre todo a la que se encuentra en situación vulnerable y se le brinden alternativas en materia de salud, empleo y educación.
El aborto, explicaron luego, no cura ninguna enfermedad ni puede considerarse dentro del procedimiento de una salud. "Todo procedimiento debe ir a favor de la salud, incluso cuando tomamos un medicamento sabemos que puede haber efectos secundarios, pero el bien que se busca es el de la salud y en estos casos no se busca la salud, es evidente que va a tener repercusiones pero a su vida reproductiva, sin descartar las afectaciones psicológicas".
Magdalena Ernaut de Código Mujer dijo luego que "la propia autoridad ha reconocido que los hospitales privados no reportan el número real de abortos practicados, porque las mujeres que se lo practican lo que menos quieren es quedar registradas, quieren mantener en silencio la experiencia, por lo que prefieren evitar al sector salud. Es decir, el hacerlo legal, no ha evitado los abortos clandestinos, por lo que en la Ciudad de México no hay nada que festejar y si mucho que lamentar, pues el clandestinaje, también obliga a las mujeres al silencio
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