Personas de todo el mundo vieron on-line el momento de la aparición al vidente Iván Dragicevic que tuvo lugar en Viena. “Estas apariciones son importantes para el género humano” había dicho previamente Iván frente a una audiencia de unos cuantos miles de personas. Los tres mensajes que recibió Iván recalcan la oración y la plegaria.
El vidente de Medjugorje, Iván Dragicevic, batió un record histórico de audiencia en Mary TV, cuando fue transmitida en directo la conferencia con personas de todo el mundo y la aparición publica, que tuvieron lugar el 25 de septiembre en la Catedral “St.Stephan’s” en Viena, Austria.
Iván dijo: “Nuestra Madre está en medio de nosotros. Estas apariciones son muy importantes para la humanidad. Nuestra Señora nos está llamando. Nos está llamando a decidirnos por Jesús y a ponerlo en primer lugar en nuestras vidas. Abrid vuestros corazones. Él os está esperando. Dios os ama y nos quiere con Él”.
La Virgen María dio este mensaje en Viena:
“Queridos hijos: también hoy os llamo a que oréis con todo vuestro corazón y que os améis los unos a los otros. Si no hay paz, rezad y recibiréis paz. La recibiréis. Por medio de vosotros y de vuestra oración la paz fluirá en el mundo. Por esta razón, hijos míos, orad, orad, orad, porque vuestra plegaria puede hacer milagros en la humanidad y en el mundo. Os doy las gracias por cada uno que vive en la oración y la acepta. Gracias por haber respondido a mi llamada.”
En su testimonio previo, Iván había dicho: “Nuestra Señora nunca habla por si misma. Siempre nos dirige a Jesús”.
Después, resumió el mensaje de Medjugorje diciendo:
“Perdonad. Confesaos. Orad con el corazón. Orad con todo vuestro ser. Orad con amor. Orad con alegría. Orad más. Orad, orad, orad. No con vuestros labios. No mecánicamente. Buscad un tiempo especial para la plegaria y para Dios. Empezad a vivir la oración. Hablad menos y trabajad más en vosotros mismos. Trabajad en lo vuestro para que se reconozca en vosotros un signo visible de fe”.
El vidente terminó de esta manera su testimonio en la Catedral:
“El tiempo en que vivimos es un tiempo de mucha responsabilidad, para la evangelización de las familias y de los jóvenes. Sólo cuando las familias empiezan a rezar juntos volviendo a poner Dios en primer lugar pueden curarse. Queridos hijos, haced que sea de esta manera”
Para Iván, el día de oración en Viena marcó el final de diez días en carretera con siete apariciones públicas en Italia más una en Austria. El 20 de septiembre en Laiguedlia, Italia, la Virgen dio el siguiente mensaje:
“Queridos hijos, también hoy, esta noche de una manera especial, ¡rezad! ¡Orad durante este tiempo de gracia! Orad especialmente por mis intenciones, orad por la paz. Vuestra madre reza con vosotros e intercede ante su hijo por cada uno de vosotros. Queridos hijos, ¡este es un tiempo de oración! Gracias porque también hoy, habéis respondido a mi llamada”.
Los diez días de Iván en Italia y Austria nos muestran mensajes más “dramáticos” de la Virgen María, comparados con los que acostumbraba él a recibir. La necesidad de oración por la paz fue el tema dominante desde el 15 de septiembre en Turín hasta el 25 de septiembre en Viena.
Entre todos los mensajes que fueron públicamente, sólo el que fue dado en Porta Potenz Picena el 21 de Septiembre se desvió del tema del conjunto total. Esa noche, la familia estaba en el pensamiento de la Virgen:
“Queridos hijos, esta noche de manera especial os invito a orar por todos mis hijos que están lejos de sus padres, por todos los hijos que se han separado de mi hijo Jesús. Queridos hijos, orad también para que ellos también vuelvan a mi hijo Jesús, que vuelvan a sus familias, y que vuelvan de nuevo a mi Iglesia. Oro por todos vosotros, e intercedo ante mi Hijo por cada uno de vosotros. Gracias, queridos hijos, porque también hoy habéis respondido a mi llamada”.
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